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¿Qué harías si en tu país existiese una costumbre de belleza que daña la salud?, ¿la continuarías o te revelarías? Descubre esta extraña tradición china de vendarse los pies
para lucir más bonitas que las mujeres siguieron por cientos de años y
que las dejó con pies desfigurados y deformados. ¡Increíble!
¿En qué consiste la tradición?
En
China, se consideraba que los pies pequeños eran sensuales, atractivos y
misteriosos, además de un símbolo de riqueza, ya que las mujeres con
pies vendados no podían trabajar. Para poder achicar sus pies, las
mujeres tenían que ajustar la venda hasta quebrar el arco del pie, y todo para conseguir casarse con alguien de dinero o de buena familia.
Además de ser una práctica dolorosa e incómoda,
muchas mujeres, con mayor suerte, terminaban siendo cojas o, las menos
afortunadas, ni siquiera podían volver a caminar. Incluso, muchas niñas
lloraban noches enteras porque no podían dormir ni comer de lo intenso
que era el dolor. ¡Alarmante!
Proceso
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| Flickr/jamescheuk |
Para
lograr lo tan deseado, las madres comenzaban a vendar los pies de sus
niñas entre los 5 y los 7 años de edad, antes de que el arco del pie se
desarrollara por completo; y se hacía, generalmente, durante el
invierno. El pie se vendaba con una pieza de tela que no se le quitaba a
la niña, solo para higienizar los pies de vez en cuando, hasta que se
casara, increíble, ¿no? Una de las costumbres era que el vendaje fuera
retirado por su nuevo marido en la noche de bodas.
No
sé tú, pero yo no dejo de sorprenderme con esta tradición. Algunos
testigos de esta práctica argumentan que a pesar de que fuera muy
dolorosa, era necesaria para poder conseguir un marido; "¿quién se iba a
casar con una mujer con pies grandes y feos?", dijo una mujer de 78
años que vivió la costumbre del pie vendado en carne propia.
Hoy en día
El vendaje de pies en China
fue prohibido en 1911 pero muchas mujeres siguieron padeciendo las
consecuencias de esa costumbre durante años. Algunas mujeres lograron
librarse del vendaje aún siendo niñas y salvarse de este destino de pies
deformados y dolor excesivo, pero hay otras que hasta el día de hoy
siguen teniendo los pies pequeños.
(Fuente: nuestrorumbo.imujer.com)
